Agosto sigue siendo el mes de las vacaciones. Tal es así que se puede afirmar que se “paraliza el país”. Cuando llega esta época del año, las empresas tienen que decidir si continúan prestando sus servicios, eso sí operando con servicios mínimos, o si optan por cerrar durante todo el mes o parte de él solucionando así el problema de raíz.
Muchas de ellas optan por colgar el cartel de cerrado por vacaciones solucionando así cualquier problema en cuanto a organización y producción. En cambio, otras, deciden mantener abierto el negocio ya que no se pueden permitir cerrar durante un mes. En estos casos, al tener menos plantilla, suelen reducir el horario de atención al cliente. Normalmente, o cierran antes o solo trabajan por la mañana. En estos casos, la planificación del personal de la empresa será fundamental para ofrecer un buen servicio a los clientes.
Ambas decisiones, cerrar o abrir en agosto, tienen sus ventajas y sus desventajas. Desde LOMUG os vamos a resumir las principales razones para mantener abierto tu negocio durante este mes, así como las ventajas de cerrarlo.
Una de las principales razones es que puedes aprovechar que tus competidores han cerrado este mes. Si tu servicio o producto tiene demanda en verano, es una excelente oportunidad para captar nuevos clientes.
Otro motivo para mantenerlo abierto es si estás ubicado en una buena zona. Cuando decimos “buena zona” nos referimos a si estás situado en una zona turística. Esto puede ayudarte a incrementar tus ventas en verano. Podrás hacer tu agosto.
A esto hay que añadir el tipo de servicio o producto que vendes. Esto será determinante para abrir o cerrar en agosto. Sectores como la hostelería no pueden cerrar en agosto. De hecho, tendrán que tener la plantilla al completo. Es su mes. Lo mismo pasa con las empresas que venden aires acondicionados o que se dedican a ofrecer pack de aventuras y deportes acuáticos.
La principal razón para cerrar en agosto es que evitarás que tus empleados discutan a la hora de coger las vacaciones. Además, a la vuelta de vacaciones, tendrás a toda la plantilla al completo para comenzar la actividad a pleno rendimiento. A esto hay que añadir que evitarás que se vayan acumulando tareas que no realizan otros trabajadores. De hecho, es contraproducente que un empleado que vuelve de vacaciones se encuentre con trabajo acumulado de 15 días.
Colgar el cartel de cerrado por vacaciones puede suponer un ahorro, sobre todo en determinadas empresas donde les resultar más rentable cerrarlo que tenerlo abierto.
Otra razón para cerrar en agosto es la atención al cliente. Si se van a producir retrasos en los pedidos o los servicios no van a ser bien atendidos, mejor cerrar.
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